La palabra confiabilidad es la palabra de moda en las industrias de todo el mundo. A menudo escuchamos declaraciones como «somos una organización confiable» o «somos una organización RCM» o «tenemos confiabilidad de clase mundial». La mayoría de las compañías tienen un buen discurso y dicen las cosas correctas cuando se les solicita, pero al final no siguen los principios básicos de confiabilidad de los equipos y procesos. En otras palabras, los fundamentos básicos para implementar y sustentar todo lo anterior nunca fueron establecidos.
La mayoría de las organizaciones hoy viven en una cultura reactiva. Reaccionar a una falla o incidente parece un acto heroico. Este tipo de cultura obtiene elogios, palmadas frecuentes en la espalda, premios y reconocimiento.
Entonces, ¿por qué una organización querría cambiar de una cultura reactiva a proactiva? La razón principal para progresar en una cultura proactiva es la seguridad del empleado y del medio ambiente. Las culturas reactivas son extremadamente peligrosas. ¿Alguna vez se te ha olvidado cambiar las llantas y tenido algún accidente en la autopista? ¿Te sentiste seguro manejando en carretera? Hubiera sido mucho más seguro reemplazar sus neumáticos en función de la condición y evitar el incidente por completo.
Cuando el equipo falla, a menudo falla en el momento más inoportuno y es peligroso en el proceso. Incidentes de explosión, arco eléctrico, contaminación, derrames, liberación de productos químicos son solo algunos de los resultados de fallas en los equipos. Cuando sus técnicos y mecánicos se apresuran a salvar el día, pueden ponerse a sí mismos, a la planta y al medio-ambiente en riesgo.
Plant Engineering. (2014). Why your organization should change from reactive to proactive culture. Recuperado de https://www.plantengineering.com/newsletters/blogs/the-maintenance-and-reliability-professionals-blog/single-blog/why-your-organization-should-change-from-reactive-to-proactive-culture/b5af9ecbe188a3324ed3d0d4007b7c67.html